Uno de los inconvenientes de viajar con niños en vacaciones es el desplazamiento que se hace hasta el destino elegido. Los viajes que conllevan pasar varias horas en avión pueden resultar agotadores para los más pequeños de la casa, y en consonancia, para los padres que no saben cómo entretener a sus hijos. En http://www.guiadevuelos.com podrás encontrar diferentes consejos, normas e ideas relacionadas con el transporte aéreo, aunque a continuación vamos a detallar como conseguir un viaje entretenido para toda la familia.
La comodidad es esencial para cualquier persona y por lo tanto los niños son los primeros que tienen que estar confortables en el avión. Es conveniente averiguar si la compañía con la que se va a volar ofrece a sus clientes almohadas, mantas o algún pequeño juguete para los más pequeños. En caso de que no lo hagan, los padres deberán llevar en el equipaje de mano, algún cojín, manta e incluso el muñeco favorito de sus hijos. Muchas veces el aire acondicionado suele estar muy alto y seguramente los niños caerán rendidos en el camino.
Si no hay forma de conseguir que duerman o descanses un rato, es conveniente tener preparado todo tipo de ideas para jugar o divertirse sin tener que moverse del asiento. Pintar o poner pegatinas son alguna de las actividades preferidas de los más chiquitines, mientras que los mayores de 6 o 7 años podrán entretenerse con algún cómic o una de las historias de sus libros favoritos. Existen juegos de mesa magnéticos y de tamaño reducido para este tipo de ocasiones, lo que puede resultar una buena forma de pasar el rato para toda la familia.
Sin embargo, hay compañías que cuentan con pantallas individuales instaladas en el cabezal delantero y que permiten a cada pasajero disponer de su propia televisión. Suelen tener películas de diferentes temáticas, incluidas las infantiles, música o series de televisión. En ocasiones, en estos programas también es posible disponer de algún juego que también harán que el vuelo se pase más rápido para los más pequeños y los más mayores.
