Aunque nadie puede negar que el avión es el medio de transporte más rápido que existe para desplazarse, lo cierto es mque con él el auténtico viajero se pierde un montón de tesoros por el camino. En ocasiones, las verdaderas experiencias no se viven en el destino final sino durante el trayecto de llegada, por eso es mucho más gratificante a la vista y los sentidos hacer un viaje en autobús que te permita disfrutar de todos los encantos del paisaje de un punto a otro.
Existen numerosas empresas que ofrecen paquetes de viajes en autobús con rutas determinadas para conocer una región, pero si lo que se busca es realizar un viaje al detalle, es recomendable confiar en empresas como Autocares Transvia con las que alquiler un autobús o minibús que permita al grupo de viajeros trazar la ruta a su gusto para poder parar dónde y cuándo ellos quieran. ¿Qué hay un museo o un pintoresco pueblo por el camino? Pues se para y se visita. ¿Qué hay un mirador que ofrece unas impresionantes vistas? Se baja y se fotografía. ¿Qué necesito parar en el próximo bar para ir al baño? No hay ningún tipo de problema.
Esta forma de viajar tiene las ventajas tanto de un coche particular como de un viaje en grupo. En el primero de los casos porque se mantiene esa independencia que aporta el poder viajar con tu propio medio de transporte, y en el segundo de los casos, porque contamos con las ventajas económica de viajar en grupo en donde todos los gastos son compartidos. A ello habría que añadir la comodidad de recorrer el camino con chofer, pudiendo descansar cuando el viajero lo precise y evitando grandes jornadas al volante que impidan poder admirar el paisaje que se recorre.
