El medio ambiente marítimo vuelve cada vez más contaminado, si tomamos el caso del Mar Mediterráneo, millares de residuos tóxicos son echados en el mar por industrias y sobre todo los barcos de transporte. Unos 220 mil barcos de más de 100 toneladas navegan por el Mediterráneo cada año, y entre estos figuran barcos que transportan cargamentos peligrosos para el medio ambiente marino. En efecto, millones de toneladas de petróleo se derraman en el Mediterráneo y esto arrastra consecuencias muy graves en la vida de los seres acuáticos.
No sólo echan en el mar petróleo sino también desechos químicos para el entretenimiento de los depósitos, sustancias liquidas como las aguas de vajillas, las aguas de carena, los hidrocarburos, los productos de detergentes, los lodos resultados del refinado petrolífero entre otros. Estos productos, sobre todo los agentes contaminantes orgánicos persistentes, llamado también POP en francés (Polluants Organiques Persistant) generan riegos irreversibles para la salud del ser humano como para la vida marina. Dañan el ecosistema marino si se derraman en gran cantidad en el mar, y eso tiene efectos muy nocivos a los animales hasta matarlos. De este hecho, resalta la idea de elaborar leyes que tratan de obligar a los constructores de barcos a guardar sus desechos tóxicos abordo y no derramarlas en el mar para salvaguardar el ecosistema pero muy poca gente las respetan. Entonces hay que tomar medidas intensivas para limitar la degradación del medio ambiente marino. Últimamente, en el mes de Junio, una treintena de ballenas jorobadas de la especie Peponocephala electra, o cabeza de melón fallaron en la costa noroeste de Madagascar y se atraparon 70 otras que no ya no quieren volver en el agua, eso ocurre en una bahía en Antsohihy (noroeste de la isla). El caso de ballenas varadas ya ocurrió en la isla Santa Maria pero hasta ahora no conocemos el verdadero problema, y ahora hay un nuevo caso en la parte Norte pues, hay que explicar lo que pasó.
De hecho, al principio, no se sabe la razón de este fallo, parecía que las ballenas tuvieron una enfermedad viral o algo así, el tiempo pasa y la muerte de estas ballenas sigue sin explicación científica. Pasaron semanas y la gente pensaba que puede ser que murieron de “indigestión” de los productos tóxicos mientras que es la consecuencia de una contaminación general y los animales se alejan de la costa para escapar a la muerte. Para ser más explicita, hay muchas ballenas que circulan entre las costas de Madagascar. Hay un lugar especifico que escogen para reproducirse y hay otro lugar para descansarse si lo podemos decir así. Lo que pasa es que cuando llegan los momentos de aparecer, las ballenas, las delfines saben ya lo que pasará en las próximas horas, o sea que saben si hay peligro en donde van a ir (buen instinto). Pero como todos los animales deben salir para buscar a comer, y en camino, claro está, tropiezan con derrames de sustancias químicas, de desechos tóxicos echados por las industrias y de las naves comerciales. Las ballenas pues buscan otro destino, pero si los productos son muy fuertes, como el caso que ocurre aquí, eso provoca la muerte rápida de los animales. Se hicieron autopsias y análisis patológicos de las biopsias de las pobres ballenas y se descubrió que es muy probable que murieran a causa de la experiencia de inspecciones sísmicas que llevó a cabo la sociedad petrolera Exxon Mobil. En efecto, usaron sonares (aparatos a ultrasonidos, emisor y receptor que sirven para el eco sonoro, a la detección de objetos submarinos, de bancos de peces y a la transmisión de señales) que necesitan sobre todo durante la prospección petrolífera, pero eso desregla el sistema de navegación de los cetáceos y puede causar su muerte precoz.
Capitulamos, pues estas ballenas murieron por causa de experiencia petrolífera ya que ya no soportaron los productos químicos usados pero hay otros casos de ballenas varadas en el mundo y el problema difiere de lo que pasó en Madagascar pero cabe decir que los seres humanos causan perjuicios a los animales marinos al echar en el mar sus desechos. Entonces no hay que derramar cualquier cosa, ni producto químico para no dañar el ecosistema. Además en el planeta, no hay un mogollón de variedad de ballenas entonces hay que preservarlas. Si cada uno contribuye y dice a su entorno que no haga derrame por cualquiera parte, tendremos un medio ambiente sano. Hay encontréis casos de derrames durante su viaje en crucero, pues hay que decir a los responsables a bordo que dejen de hacerlo y si no hacen caso, avisa las autoridades para que sancionen y castiguen los propietarios del barco. Cada Estado debe instaurar y aplicar leyes para limitar los gestos de no respeto.
