Si verdaderamente quieres conocer una ciudad, quieres disfrutarla, quieres vivirla, no hagas turismo y cumple con estas pautas:
Lo más importante de una ciudad es su gente, sus costumbres, intégrate y evita las concentraciones de turistas. Cuando veas un grupo de gente de más de 10 personas con cámaras de fotos, ¡sal corriendo!
En segundo lugar conoce su Arquitectura, sus edificios más singulares, sus construcciones históricas, etc., siéntelas, no te pongas a hacer fotos sin parar como un turista, disfruta el momento, ya tendrás tiempo de hacer fotos. Por ejemplo del maravilloso Casco histórico de Cáceres (Patrimonio de la Humanidad), lo más bonito no es estar ahí, no es tener una buena foto para el recuerdo, lo más importante es sentirlo, sentarte en un rincón y disfrutar del silencio.
Por último, otro aspecto importantísimo es la gastronomía, déjate recomendar y come los platos típicos del lugar, evita los restaurantes de comida rápida, cuando veas algún letrero con alguna hamburguesa gigante date la vuelta, evita la tentación, no seas tacaño y gástate algo de dinerito al menos un día en comer en algún restaurantes típico de la zona, pregunta a los lugareños y gustosamente te recomendaran algún lugar. 
Un espacio interesante donde encontrar publicaciones sobre estos temas es Arquitectura: Trabajo y Ocio, como por ejemplo visitar la zona de Pier 17 y cenar en el Cabana si vas a Nueva York, o las tradiciones y los canales de Bélgica.
Si cumples con estas pautas te enamorarás de una ciudad y estarás deseando volver. ¿No es tan difícil verdad? ¡Siente las ciudades!
