Aunque no lo creas, el verano ya parece anunciarse en las temperaturas que ahora mismo disfrutamos. Resulta que hemos salido de un invierno crudo y que ha sido largo y nos hemos sumergido, de repente, en unas temperaturas que rondan los 30º en mayo. Esto es indicativo de que los rigores estivales están a la vuelta de la esquina, así que hemos de ir pensando qué vamos a hacer en los meses de julio y agosto, porque con la mejora tibia de la economía y el hecho de que en estos periodos todo parece quedar en estado latente en nuestro país hay que saber cómo afrontar estas épocas. Así que nosotros te vamos a dar dos destinos y un medio de transporte para que los puedas visitar sin problemas de ningún tipo. Hoy te hablamos de Bilbao y Barcelona como lugares excelentes y del taxi como medio adecuado para moverte por estas urbes tan modernas como abundantes en su patrimonio.
¿Por qué el taxi? Pues porque nosotros entendemos que es un medio de transporte tan excelente como práctico. Que visitemos una ciudad determinada resulta un alivio para nuestra cargada y agitada rutina, que siempre vamos estresados de un lado a otro. Por eso, cuando hacemos turismo, hemos de buscar aquello que nos permitirá relajarnos de la forma más óptima y excepcional. Pero eso no quiere decir que lleguemos tarde a un sitio o que estemos perdidos sin remedio, así que una guía virtual de taxis nos puede sacar del atolladero. Y dado que hoy en día los teléfonos inteligentes nos permitirán llevarla encima siempre, esto será la mejor solución posible para los problemas que nos puedan sobrevenir en las dos ciudades que te hemos indicado.
Visitar Bilbao, por ejemplo, es visitar un sitio que ha sabido reconvertirse de la mejor manera posible. Andar por la ría o ver su elegante museo Guggenheim es cumplir el sueño de muchas personas, que saben que están ante una ciudad que se ha reinventado a sí misma. Pero para poder verla bien, sobre todo si llevamos los días tasados, el taxi se transforma en excepcional.
Con respecto a Barcelona ocurre un poco lo mismo. Es verdad que andar por el casco antiguo es una experiencia excelente, y nosotros te animamos a ello. Pero llegar a tiempo al teatro, por ejemplo, o a ese restaurante que hemos reservado implicará que hemos de coger un taxi sí o sí. Los transportes públicos de estas dos ciudades, además de que pueden ir atestados, no son seguros por los robos que se producen. Por eso es mejor pasar de problemas, acudir a una guía virtual de taxis y lograr que nuestras vacaciones, además de relajantes, sean una experiencia en la que todo nos salga de rechupete. Valdrá la pena, ya lo verás.
